Título: Perfect Blue.
Dirección: Satoshi Kon.
Duración: 1h y 21 min.
Elenco: Junko Iwao, Rica Matsumoto, Shiho Niiyama, Masaaki Okura, Shinpachi Tsuji y Emiko Furukawasanagi.
Genero: Drama.
Estreno: 5 de agosto de 1997.
Sinopsis: “Mima es la cantante de un famoso grupo musical japonés. Debido al fracaso de ventas de sus discos, su mánager decide apartarla del grupo y darle un papel en una serie de televisión. Mima cae entonces en una profunda depresión que la lleva a replantearse su vida y su carrera, pero su crisis se agrava cuando descubre que su vida está al alcance de cualquiera en Internet y que alguien la está vigilando. Cuando la serie empieza a emitirse por televisión, Mima comprueba que la ficción se reproduce en su vida real: sueño y realidad se confunden hasta el punto de cuestionarse su propia identidad. El desarrollo de los acontecimientos y su propia intuición llevarán a la protagonista a un desenlace absolutamente inesperado…«

Un nuevo mes en el Proyecto Madhouse y hoy toca hablar de una de las películas más importantes del estudio. Perfect Blue no es simplemente una gran película de animación sino que es una de esas obras que trascienden formatos y que incluso muchos cinéfilos que suelen descartar a las películas de animación le tienen respeto. Además este es el debut como director de uno de los directores más grandes que dió la industria de la animación japonesa, Satoshi Kon.
La producción de Perfect Blue empieza cuando Masao Maruyama (productor de Madhouse y eventual creador de Studio Mappa) decide crear una adaptación de la obra Perfect Blue de Yoshikazu Takeuchi. Para hacer esto decide llamar a Satoshi Kon, del que había visto su adaptación de Jojo’s Bizarre Adventure. Lo curioso de todo esto es que Takeuchi no quería hacer una película de animación basada en su obra sino que quería hacer una película live action, lamentablemente por temas de presupuesto esa película pasó a ser un especial para televisión, luego una OVA en animación y a último minuto se decidió cambiar para ser una película (en parte esto explica su corta duración).
Fue durante esta producción que Satoshi Kon empezó a agregar su propia mano al trabajo y a crear algo con su firma. Si leemos el libro original Perfect Blue no es más que un slasher donde una idol es perseguida por un fanático loco. Esto era lo que estaba pensado hacer en el guión original. Lo divertido de todo esto es que cuando Satoshi Kon se une al proyecto él decide no leer la obra de Takeuchi y, guiándose sólo con el guión, agregarle un toque de terror psicológico. Esto último era algo que no era común en la animación japonesa y que hizo que Perfect Blue resalta de inmediato frente a otras películas.

Perfect Blue nos presenta a Mima Kirigoe, una integrante del grupo de idols «CHAM!» que debe dejar su grupo para dar un giro a su carrera y empezar a trabajar como actriz. Esto es algo relativamente común en el mundo del entretenimiento asiatico donde las artistas son un producto de consumo rápido mientras sean jóvenes y rápidamente se pasa a una nueva artista. En el caso de Mima claramente se nota que el cambio de su carrera se debe a su edad y que ya no puede ser esa «niña perfecta que canta en un escenario».
Con el cambio de su carrera empezamos a ver a una Mima que no sólo debe procesar que ya no es una pop idol y que ahora sus roles serán diferentes. Mientras tanto vemos como el cambio de imagen y de rol no sólo la impacta a ella sino a sus fanáticos, algo que se potencia cuando empieza a aparecer en internet un misterioso blog llamado «el cuarto de Mima». En este cuarto hay una mujer (que dice ser la verdadera Mima) y que cuenta su vida como Pop Idol, además empieza a acusar a la verdadera Mima de ser una impostora que sólo quiere arruinar su imagen.
Esta web llega a los ojos de nuestra protagonista que sólo lo ve como una curiosidad y que más que nada decide seguirle el paso de forma leve mientras se concentra en su nueva carrera. Es durante este momento que empezamos a concoer a un misterioso y perturbador fanático que la mira desde lejos y no hace más que poner incomoda a una Mima que se está chocando con que con su rol de actriz ya no siempre deberá ser la niña inocente sino mostrar su cara en situaciones más duras.

Las cosas empiezan a volverse turbias cuando aparece una carta para Mima en uno de los sets de filmación con una pequeña bomba y podemos ver como varias personas de la producción de la serie, donde ahora trabaja, se ven atacadas de forma misteriosa. Este espiral de violencia empieza a escalar hasta que Mima debe filmar una perturbadora escena de violación. Aquí me gusta como Satoshi Kon siempre logra dejar claro que estamos hablando de actuación y de una escena (que por más que es extremadamente perturbadora) está actuada pero que lamentablemente deja una profunda herida psicológica en nuestra protagonista.
Esta herida hace que Mima empiece a ver una versión fantasmal de sí misma vestida de Idol. Esta Mima dice ser las verdaderas intenciones de nuestra protagonista y ser la personificación de la Mima que escribe en el blog. Si bien todas sus apariciones son perturbadoras el nivel de violencia irá escalando en un espiral que terminará explotando sobre el final de la película. Este espiral no sólo es de violencia sino que afecta gravemente la salud mental de Mima, un deterioro que hace que muchas veces no tengamos claro si lo que andamos viendo son alucinaciones de Mima o realmente lo que está pasando. Esto hace que sobre el final de la película el director juegue mucho con la percepción de los personajes y la nuestra al verlo.
Perfect Blue es una gran película en cuanto animación y se nota todos los mejores aspectos de Madhouse al crear un mundo que es un reflejo fiel del mundo real pero a la misma vez dar algunos aspectos fantásticos o sobrenaturales a algunos personajes (más que nada a «la otra Mima»). Una de las cosas que me llamó la atención de la animación es que el tipo de animación de esta Mima me recuerda mucho a los movimientos de Sakura en Sakura Cardcaptor. Lo curioso de todo esto es que muchos animadores como Takuo Noda o Masaharu Tada trabajaron en Perfect Blue y enseguida empezaron a trabajar en el anime de Sakura (una de las producciones de Madhouse luego de esta película) por lo que los fanáticos de las CLAMP podrán disfrutar varios detalles interesantes en su animación.

En cuanto al sonido Perfect Blue es una película sobre una idol y eventualmente tiene que tener importancia su música. Aquí tenemos a Emiko Furukawa y Mie Shimizu con varias pegadizas y excelentes canciones. Además de todo esto es importante resaltar que el cast de voz japonés es de primer nivel con Junk Iwao como la voz de Mima (Tomoyo en Sakura Cardcaptor), Rica Matsumoto como Rumi (Ash Ketchum en el anime de Pokémon) y Shiho Niiyama como Rei (Seiya en Sailor Moon) por lo que tenemos una gran selección de voces icónicas de los 90 para los que nos gusta el anime en su idioma original.
La industria del POP es una industria que toma y descarta artistas cuando dejan de estar de moda pero que en Japón está mezclada con otros tipos de cosas turbias, desde fanáticos pedófilos y abusadores, hasta suicidios por depresión de los artistas. Esto sumado al uso de internet como un lugar para acosar famosos y movilizar hordas de fanáticos hace que Perfect Blue sea una obra extremadamente adelantada a su tiempo y que presenta una problemática para la que, lamentablemente, aún no tenemos una solución.
Esta película es dura de ver pero creo que es una de las mejores producciones que hizo Madhouse en su historia y que deberían darle una oportunidad a todos los que disfruten de la animación japonesa, o simplemente de una buena película de terror psicológico con un mensaje crítico en su interior.

El mes que viene seguimos con el Proyecto Madhouse y toca hablar de un clásico de «el padrino del manga» Osamu Tezuka. La película de la que hablaré en Marzo es nada más ni nada menos que Metrópolis. Si les gustó este post y quieren leer el resto de mis entradas sobre Madhouse pueden hacerlo en este link.
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