Hace un par de días, la empresa Valve dueña de la plataforma Steam anunció el cierre de su servicio Greenlight. A simple vista esto puede parecer una simple decisión de negocios, pero a la larga podemos ver que tiene consecuencias bastante más grandes que un simple «cierre de servicio».
Para entender la importancia del servicio Greenlight es necesario entender los dos tipos de desarrolladores (encargados de hacer la juegos) que hay en mundo de los videojuegos. Los primeros son los estudios AAA (o estudios completos) estos estudios son empresas constituidas que tienen bastantes empleados. Los segundos (que son los que nos van a interesar en este post) son pequeños estudios formados por pocas personas, estas personas desarrollan juegos en su tiempo libre (es decir que no pueden vivir de sus juegos) y son los principales beneficiados del servicio Greenlight.
¿Que hacía Greenlight?
Greenlight era la puerta de entrada a la tienda de Steam. En este servicio los desarrolladores de juegos podían mostrar sus proyectos, si un número considerable de jugadores «votaba» a favor de un determinado proyecto, Steam podría aceptar ese juego e incluirlo en su tienda. Esto es algo que sirve más que nada a los desarroladores indie, ya que estos podían «matar dos pájaros de un tiro«. Primero tenían exposición a sus potenciales compradores y segundo conseguían el derecho a figurar en una de las principales tiendas virtuales de juegos de PC.
El problema con Greenlight era que al tener un precio bastante humilde para los desarrolladores, el servicio era un servicio lleno de juegos basura. Si en cualquier momento del día uno entra a Greenlight es común que se encuentre con juegos pésimos que no van a llegar a ningún lado.
Por poner un ejemplo, acabo de entrar y encontré este juego. Honestamente no se que espera el desarrollador, pero es un juego en el que no pasa nada y yo no compraría nunca un juego así de aburrido.

De todas formas, si vemos el lado bueno de la ecuación. En el año pasado más del 30% de los juegos que se vendieron en Steam fueron estrenados en el 2016, de ese porcentaje muchos fueron juegos indie. Estamos hablando de un porcentaje enorme.
Si estuvieron atentos al mundo de los videojuegos, seguramente les suenen nombres como Stardew Valley, Broforce, Super Meat Boy, Terraria o Undertale. Todos los juegos que nombré antes son juegos indie y son juegos que están bien parados para sus fans. Claramente en un servicio como Greenlight va a haber productos malos, pero los productos buenos que salen de desarrolladores indie pueden tener una calidad enorme.

Steam Direct.
Este es el nombre del servicio que remplazará a Greenlight, la primer diferencia es que en este caso no es necesario tener votos para que tu juego sea publicado. El principal requerimiento es que el desarrollador pague una cuota que puede variar entre USD 100 a USD 5.000 (una diferencia abismal).
Si bien este nuevo servicio promete ser más ágil para los desarrolladores indie, los cuales podrían estar vendiendo sus juegos en menos tiempo y obteniendo ganancias, el precio de la cuota es algo que puede dejar a muchos devs afuera. Lamentablemente, esos desarrolladores podrían quedarse afuera del sistema por no tener suficiente dinero para pagar la cuota y creo que el verdadero problema está aquí. Ya no importa la calidad del producto, lo que importa es que la persona pueda pagar la cuota. Con esa lógica tendríamos cientos de juegos malos hechos por gente rica y nos estaríamos perdiendo juegos excelentes hechos por gente pobre pero apasionada.
El problema.
Steam empezó como una tienda virtual donde uno podía comprar juegos de manera fácil y legal. Con el paso del tiempo, esta tienda fue evolucionando y terminó siendo un híbrido entre «red social/tienda de videojuegos/lugar para conocer desarrolladores indie». Con estos cambios, Steam estaría matando a una gran parte de desarrolladores de juegos indie, les estaría poniendo un muro enorme que por más esfuerzo y pasión que pongan por sus juegos no van a poder sortear (porque no tienen el dinero y mientras no vendan sus excelentes juegos no lo van a conseguir).

La verdad, esto es una noticia demasiado nueva y aún no se sabe bien que precios podría tener la suscripción a este servicio. Por ahora solo podemos esperar que Valve busque en sus corazones e intente poner un precio accesible para todos los desarrolladores que quieran trabajar con ellos.
Creo que en los últimos años se demostró una y otra vez que no es necesario tener una inversión millonaria y un ejército de programadores y artistas para hacer un gran juego. Steam fue una de las plataformas desde la que se dieron a conocer muchos de estos proyectos independientes, sería una lastima que por culpa de esta misma plataforma muchos de estos grandes artistas (porque reconozcamoslo, si una persona hace un juego de 0 y sin ayuda es que es un artista) tengan que despedirse de sus sueños y nunca podamos conocer sus juegos.
Yo, solo espero que Steam Direct sea lo que necesita la industria indie para mejorar y no el primer clavo del ataúd de los desarrolladores indie.
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